Frená

Frená

Date un día libre para acomodarte.

Frená

Acomodate

Recalculá

Si no podés dedicarte todo un día, si crees que aún no es posible, por tus mil razones, frená un par de horas. Movete de dónde estás, pará, mirate, abrazate.

Hay quienes pasan la vida corriendo, de trabajo en trabajo, de obligación en obligación, haciendo malabares para agradar, conformar, conciliar, para sobrevivir.

Date un tiempo para vos, mimate, consentite, malcriate. Hacé de cuenta por un ratito que nadie te ve, ni siquiera te veas vos, porque sinó vas a juzgarte, y apapachate con eso que te hace sonreír. Y cuando te encuentes sonriendo, hacé más de eso, hasta que te llenes de internas carcajadas. Porque muchos de los que llaman locos, descubrieron en alguna parte eso que los enciende y se animaron a mantenerse encendidos, sin percatarse de las miradas cuestionadoras de su alrededor.

Frená. Cerrá los ojos. Respira pausado.

Encontrate contigo, invitate un café, una cerveza, sacate a bailar.

Frená y disfrutá.

Regalate una hora entera, un día entero, un mes entero, un año entero, regalate la vida que viniste a vivir y deja de correr atrás de todo lo que te cansa, te ocupa, te preocupa.

Frená, acomodate, recalcula.

Date un día libre para acomodarte.

Frená.

Isela

Deja un comentario