Nuestro cuerpo es el medio físico para comunicarnos con el entorno.
Los canales energéticos son receptores y emisores de energía vital, de proyecciones y percepciones. Mantener en movimiento la energía corporal ayuda a ampliar estos canales y desbloquear eso que identificamos como frenos de nuestra vida.
Una recorrida consciente por ellos, es una herramienta magnífica, para iniciar movimientos energéticos de activación de nuestro poder personal.
Chakra Raíz – Muladhara
Donde comienzan todos los caminos
Ubicado en la base de la columna y suelo pélvico el chakra raíz es la primera puerta energética del cuerpo. Representa nuestras necesidades más básicas: seguridad, estabilidad, pertenencia.
Cuando está en equilibrio, sentimos que la vida nos sostiene, que hay un lugar para nosotros en el mundo.
Cuando se bloquea, aparece el miedo, la sensación de estar a la intemperie o en constante lucha.
Visualiza una raíz que nace de tu pelvis y se extiende hacia el centro de la Tierra.
Imagina que te conecta con algo antiguo, sabio y estable.
Siente que no tienes que correr más. Estás firme, anclada, en paz y sostenida por el planeta.
Ejercicios para activar y limpiar el chakra raíz:
1. Caminata consciente (Thich Nhat Hanh – Budismo Zen)
Camina lentamente, sintiendo cada paso como un acto sagrado.
Repite mentalmente al inhalar: “He llegado”, y al exhalar: “Estoy en casa”.
Cada pisada es un regreso a ti, al momento presente.
Hazlo sin prisa, incluso si son solo unos minutos.
2. Respiración de tierra (taoísta y budista)
Siéntate con la espalda recta, pies apoyados en el suelo en contacto con la tierra.
Visualiza una luz roja encendiéndose suavemente en la base de tu columna, bañando tu pelvis.
Al inhalar en 5 tiempos, imagina que la energía de la tierra sube por tus piernas hasta tu zona pélvica. Tíñela con la luz de tu pelvis y exhala en 5 tiempos también.
Al exhalar, suelta por ese mismo canal la tensión, miedo o sensación de desprotección.
Repite por 7 a 10 respiraciones.
3. Mantra de activación del chakra raíz (tradición hindú)
Canta o repite en voz baja el sonido LAM.
El sonido vibra en la zona pélvica y te ayuda a abrir y armonizar este centro energético.
Puedes usarlo durante la meditación o al hacer respiraciones lentas y profundas.
4. Acción simbólica
Realiza una limpieza física con intención: reorganiza un espacio, barre el piso, riega una planta. Ponle un lazo energético a esa acción, sabiendo que ordenar tu entorno también ordena tu energía base.
Al finalizar repite 3 veces: “Estoy en mi lugar. Estoy a salvo aquí.”
Cada vez que honras el presente, el cuerpo y el entorno, estás activando tu chakra raíz.
Estás regresando a casa. Desde allí, todo lo demás se vuelve posible.
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Chakra Sacro – Svadhisthana
Donde el deseo se convierte en movimiento
Ubicado en el bajo vientre, justo unos dedos por debajo del ombligo, el chakra sacro es el centro energético del placer, la creatividad, la emoción y el goce.
Aquí habita el movimiento fluido, el juego, la capacidad de sentir sin culpa y crear desde lo que somos.
Cuando esta bloqueado, solemos reprimir nuestras emociones, sentir desconexión con el cuerpo, o vivir la sensualidad desde la rigidez o el exceso.
Cuando se abre, desarrollamos la intuición, la percepción, nos conectamos con la energía creadora.
Visualiza un vórtice, un remolino de luz naranja en la zona baja de tu abdomen, girando suave y cálidamente.
Imagina que con cada respiración te haces más sensible, más receptiva, más libre.
No tienes que controlar: puedes fluir.
Ejercicios para activar y limpiar el chakra sacro:
1. Meditación del agua (budismo tibetano y el taoísmo)
Coloca tu cuerpo en una posicion cómoda y lleva tu atención al abdomen bajo.
Visualiza un cuenco con agua clara dentro de ti.
Al inhalar, imagina que lo llenas con energía de vida.
Al exhalar, suelta emociones estancadas, tensiones o memorias que ya no quieres sostener.
Observa cómo ese cuenco se mantiene tranquilo y cristalino.
2. Movimiento libre (danza consciente y bioenergética)
Pon música suave o tribal y permítete mover las caderas con libertad.
No se trata de hacerlo “bien”: se trata de soltar control.
Puedes cerrar los ojos, bailar con un pañuelo, o simplemente permitirte sentir placer en el movimiento.
Este ejercicio aunque parece físico, es energético y emocional.
3. Respiración lunar (yoga kundalini y la filosofía tántrica)
Acuéstate o siéntate y lleva las manos sobre el abdomen bajo.
Respira profundamente y conéctate con la energía de la luna, imagina que tu respiración se une partícula a partícula a las partíclas que rozan la luna, no hay divisiones en el Universo.
Imagina que una luz plateada desciende sobre ti y se aloja en tu vientre.
Repite internamente: “Me abro al placer de estar viva.”
4. Ritual de goce cotidiano (filosofía del tantra y mindfulness)
Elige un momento del día para disfrutar algo para ti, con plena presencia: una comida, una ducha, una tela suave, un aroma.
No te apures. Observa cómo el cuerpo reacciona.
Di en voz baja: “Merezco disfrutar.”
Cultivar el goce, abrazar el disfrute, es un acto de sanación.
Sentir placer no es superficial: es profundo, revolucionario, vital.
El chakra sacro te invita a moverte con emoción, a crear con deseo, a fluir sin culpa.
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Chakra del Plexo Solar – Manipura
El fuego que transforma la voluntad en acción
Este chakra se encuentra en el centro del cuerpo, justo en la boca del estómago, entre el ombligo y el corazón.
Es el punto donde la energía se enciende y toma dirección.
Aquí viven la autoestima, el poder personal, la decisión, la capacidad de decir “yo quiero/elijo/puedo».
Cuando este centro esta equilibrado, sentimos claridad, dirección y empoderamiento. Somos capaces de tomar decisiones sin miedo al juicio, con confianza serena. Cuando está bloqueado, aparece la indecisión, la culpa, la falta de límites o, por el contrario, el exceso de control y rigidez.
Visualiza una esfera de fuego amarillo girando lentamente en tu plexo.
No quema: ilumina. Calienta. Te recuerda que puedes elegir, que puedes decir que no, que puedes decir que sí.
Ese fuego es tuyo. No necesitas que nadie lo encienda por ti.
Ejercicios para activar y limpiar el chakra del plexo solar:
1. Respiración solar (budismo tibetano y yoga).
Siéntate con la espalda derecha, manos sobre el plexo solar.
Al inhalar, imagina que respiras luz amarilla como si absorbieras el sol.
Al exhalar, deja salir la duda, el miedo o la necesidad de aprobación.
Haz 9 respiraciones conscientes, y al final repite:
“Confío en mí. Elijo desde mi centro.”
2. Postura del guerrero I o II (yoga)
Mantén la postura firme, enraizada, y siente cómo el plexo se expande.
Con una pierna hacia atras y los brazos extendidos busca el eje de tu cuerpo.
Repite mentalmente mientras sostienes la postura:
“Mi poder nace de la presencia.”
Es ideal para reconectar con tu fuerza y tu autonomía.
3. Pequeños actos de voluntad (filosofía budista aplicada)
Elige una acción concreta que has estado postergando por inseguridad: decir algo, tomar una decisión, poner un límite, organizar algo.
Hazlo con conciencia, no desde la presión sino desde la libertad.
Obsérvate hacerlo. Honra ese fuego que comienza a crecer.
4. Ejercicio energético con color (visualización guiada)
Acuéstate o siéntate cómodamente.
Visualiza una llama amarilla encendiéndose justo en tu abdomen superior.
Cada vez que inhalas, la llama se agranda.
Cada vez que exhalas, se estabiliza.
Siente cómo ilumina el camino delante de ti.
Repite internamente: “Soy capaz. Soy suficiente. Soy dirección.”
El chakra del plexo solar te recuerda que no hay mapa sin caminante.
El fuego que vive en ti no solo te empuja: te alumbra.
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Chakra del Corazón – Anahata
El puente entre el cielo y la tierra
Ubicado en el centro del pecho, el chakra corazón es la puerta energética donde se cruzan el amor, la compasión y la apertura.
Aquí habita la ternura, pero también el coraje. Porque abrir el corazón, aunque parezca suave, es uno de los actos más poderosos que existen.
Cuando este centro está armonizado, podemos dar y recibir sin miedo, expresar sentimientos auténticos, sostener el dolor sin endurecernos.
Cuando se bloquea, aparecen el resentimiento, la frialdad, la dificultad para confiar o la necesidad de protegernos todo el tiempo.
Visualiza una luz verde o rosada en el centro de tu pecho, latiendo como si respirara contigo.
No se trata de amor romántico, se trata de conexión contigo, de dejar de pelear con la vida, de abrir los brazos sin perder el eje.
Ábrelo a ti, antes que a nadie.
Ejercicios para activar y limpiar el chakra del corazón.
1. Meditación del corazón compasivo (budismo tibetano)
Siéntate cómodamente. Respira imaginando que transformas el sufrimiento de alguien que amás (o el tuyo) en calma y sanación.
Imagina una luz verde fluyendo por tu pecho llena de alivio y comprensión.
Repite varias veces, sintiendo el centro del pecho expandirse.
Es un ejercicio profundo de transformación energética y emocional.
2. Apertura del pecho (yoga y bioenergética)
Une tus manos en la espalda y abre el pecho hacia adelante.
Respira profundo y repite mentalmente:
“Estoy a salvo para abrirme. No necesito protegerme todo el tiempo.”
3. Cartas de perdón (inspiración terapéutica)
Escribe una carta que no necesariamente enviarás, a alguien a quien necesites perdonar o agradecer.
Hazlo con honestidad.
Luego colócala sobre el pecho, respira, materializa esa energía en algún plano, si deseas quémala como acto simbólico.
El amor no siempre se ve. A veces solo se siente, y eso también cuenta.
4. Ejercicio de conexión (presencia energética)
Lleva ambas manos al centro del pecho.
Cierra los ojos y respira pausadamente.
Repite en voz baja:
“Estoy aquí. Me siento. Me abrazo.”
Quédate allí unos minutos. Deja fluir lo que sientes, lo que ha permanecido encerrado en tu pecho. Si hay lágrimas, déjalas caer. Si hay risa, también.
El corazón no necesita explicaciones, necesita espacio.
El chakra del corazón te invita honestidad con tus sentimientos.
Que no cierres más puertas por miedo. Que habites tu verdad con amor.
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Chakra de la Garganta – Vishuddha
La voz que se alinea con el alma
Ubicado en el centro de la garganta, Vishuddha es el centro energético de la comunicación, la verdad interna, la expresión auténtica y la coherencia.
No se trata solo de “decir”, sino de decir lo que importa, lo que nace desde lo profundo, sin manipular ni agradar, pero también sin herir.
Cuando este chakra está en armonía, expresamos lo que sentimos con claridad y respeto.
Escuchamos con atención.
Nuestra palabra tiene peso y presencia.
Cuando está bloqueado, sentimos miedo a hablar, a poner límites, a decir lo que realmente queremos. Aparece la garganta apretada, los silencios forzados o el discurso agresivo.
Visualiza una espiral de luz azul celeste girando en tu garganta.
Imagina que despeja, que afloja, que limpia.
Respira por ese centro como si fuera una flor que abre sus pétalos para emitir sonido, palabra, canto.
No necesitas aumentar la potencia de tu voz, solamente sincerarte contigo misma.
Ejercicios de activación y limpieza, chakra garganta.
1. Meditación del sonido (budismo y yoga)
Siéntate cómodamente, cierra tus ojos y repite el sonido HAM
(la sílaba semilla de este chakra).
Hazlo en voz baja, dejando que el sonido vibre en tu garganta y pecho.
Puedes acompañarlo de respiraciones largas y pausadas.
Este ejercicio disuelve tensiones invisibles y limpia la energía del habla.
2. Escritura liberadora (filosofía terapéutica)
Toma papel y lápiz y escribe durante 10 minutos sin levantar la mano.
No importa si tiene sentido o no. Deja que salga lo que está contenido.
Luego puedes guardar, romper o quemar esa hoja.
El objetivo no es obtener un texto hermoso, sino darle salida a lo que guardas.
Aunque tal vez, te sorprendas con el resultado.
3. Movimiento y voz (bioenergética)
Gira el cuello suavemente en círculos, estira hombros, libera mandíbula. Afloja los músculos de los brazos y de tus piernas, sacúdelos.
Luego emite sonidos sin palabras, como un suspiro largo, un canto libre, una vocal sostenida.
Este ejercicio es ideal para aflojar tensiones en quienes tienen miedo escénico o dificultad para expresarse.
4. Verdad diaria (consciencia budista)
Al finalizar el día, pregúntate:
¿Hoy dije algo que no sentía verdadero?
¿Hoy me callé algo que necesitaba decir?
No te juzgues. Solo observate.
El primer paso para expresarte con verdad… es escucharte primero a ti.
El chakra de la garganta no te pide que hables más.
Te pide que te calles menos ante ti misma. Que te digas la verdad.
Y si eliges hablar… que sea para crear puentes, no para defender muros.
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Chakra del Tercer Ojo – Ajna
Se ubica en el centro de la frente, entre las cejas.
El color que lo representa es el índigo o azul profundo.
Se asocia con la luz, la visión interior, la intuición y el poder de ver más alla de lo visible.
Cuando este centro se encuentra activo, sentimos que vemos con claridad aún cuando cerremos lo ojos. Encenderlo es alinear el afuera con el adentro, es elegir simplemente lo que necesitas ver.
Es el centro de la sabiduría silenciosa, de lo que llamamos corazonadas, de esa energía que nos llama por ese camino y no otro.
Cuando está equilibrado este centro energétcio la mente se aclara, el juicio se afina y la imaginación deja de ser una forma de escape para convertirse en una herramienta creativa.
Ejercicios para armonizar el Tercer Ojo:
Visualización guiada (meditación budista tibetana)
Coloca tu cuerpo en una posición cómoda, con la columna erguida.
Cierra los ojos y lleva tu atención al centro de la frente.
Imagina una llama violeta o azul índigo encendida ahí.
Observa cómo esa llama respira contigo: se expande y contrae, se dirige hacia adelante, hacia atrás, hacia los costados, se extienden por todas las moléculas que la hacen girar.
Permite que la llama ilumine tus pensamientos sin juzgar. Solo observa.
Permite que esa llama integre ideas nuevas que llegarán para facilitarte el camino. Recíbe con gratitud y amor.
Diálogo simbólico (con tu yo del futuro, con otra línea temporal, con la energía creadora, con lo que tu mente conciba más real)
Antes de dormir, escribe una pregunta abierta en un cuaderno (por ejemplo: ¿Qué necesito ver que aún no estoy viendo?).
Deja que tu inconsciente la trabaje durante el sueño.
Por la mañana, anota lo primero que te venga a la mente.
Es una forma de entrenar tu intuición.
Yoga: postura del niño con foco en el entrecejo
Adopta la postura del niño (balasana*), y en ese silencio cómodo, respira con la frente apoyada en el suelo, sintiendo ese punto de contacto como una llave que abre la visión interior. Los tiempos son tan personales como la apertura alcanzada en cada ejercitación.
(*postura de yoga restaurativa que consiste en sentarse sobre los talones y plegar el cuerpo hacia adelante, con la frente apoyada en el suelo y los brazos estirados o relajados).
Cuando Ajna se armoniza:
Empiezas a confiar más en ti.
A ver los patrones ocultos.
A elegir con claridad, incluso cuando el camino no es obvio.
El mundo se vuelve menos confuso, porque aprendes a escuchar el lenguaje simbólico de tu alma.
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Chakra Corona – Sahasrara
Ubicado en la parte superior de la cabeza, sin bordes ni límites definidos. Se visualiza como una luz blanca o violeta.
Representa la conexión espiritual, la sabiduría universal, la unidad con lo divino.
Este centro energético nos permite atravesar enormes distancias de espacio y de tiempo. Es la apertura al recordar, a sentir gratitud simplemente por estar aquí, ocupando ese espacio de conexión con la fuente.
Mantener activo este centro energético es primordial para que comencemos a fluir con armonía y facilidad.
Algunas personas lo sienten como un cosquilleo leve en la coronilla. Otras, como una expansión interior que no cabe en el cuerpo.
La meditación, la contemplación del cielo estrellado, los mantras, la música, todo lo que trasciende el ego, nutre este portal invisible.
Para recordar que somos parte del todo, y no es necesario que nos recortemos nada.
Y cuando ese recuerdo se instala, la energía no solo fluye: guía.
El cuerpo se vuelve instrumento, la intuición brújula, y el amor se convierte en la fuerza que impulsa a elegir con libertad el próximo paso.
Abrir este portal es dejar de pertenecer a lo pequeño y recordar que somos parte de algo mucho más grande.
Este chackra no se activa con el hacer, sino con el permitir. No se trata de buscar, sino de abrirse a recibir.
Cuando está armonizado, el alma respira, el ego se aquieta y el cuerpo se convierte en canal.
Se experimenta como una expansión luminosa, un estado de gratitud profunda y la certeza de que todo tiene sentido.
Ejercicios para activar y armonizar el chakra corona:
Medictación en silencio (Budista)
Siéntate en postura cómoda, espalda erguida.
Cierra los ojos y lleva la atención a la coronilla.
No visualices nada. Solo respira y permite que la mente se aquiete.
Si aparecen pensamientos, obsérvalos sin juicio y déjalos pasar.
Con cada exhalación, suelta la necesidad de entender.
Quédate en el espacio del silencio. Deja que el vacío te hable.
Esta práctica busca alcanzar un estado de neutralidad, de pausa vacía.
Su potencia está en lo que aparece cuando no intentas controlar nada.
Contemplación activa (Tolteca)
Da un paseo en silencio al amanecer o al atardecer.
Observa el paisaje sin pensar.
Percibe que eres parte de ese mismo movimiento.
Que estás siendo observada, tanto como tú observas.
Hazlo durante al menos 10 minutos, sin distracciones ni expectativas.
Al finalizar, repite en voz baja: “Soy parte del todo. El todo está en mí”.
Mantra de apertura (hindú)
Canta o repite el sonido “OM” llevando la vibración al centro de la cabeza.
Hazlo al menos 7 veces, inhalando profundamente antes de cada repetición.
Puedes acompañarlo con una ligera presión de los dedos en la coronilla, o con la visualización de un loto blanco abriéndose.
Cuando el chakra corona se armoniza, tu universo lo contiene todo.
Desaparece la necesidad de controlar y aparece la confianza.
Ya no hay separación entre lo que eres y lo que deseas ser.
Te conviertes en testigo de tu propia evolución, caminando en paz, disfrutando tu existencia.
Coaching Energético 
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